Qué es la parálisis del sueño psicológica

Qué es la parálisis del sueño psicológica

La parálisis del sueño es un trastorno perturbador y desconcertante que afecta alrededor del 60% de la población mundial al menos una vez en la vida. Lo caracteriza la breve sensación de no poder hablar ni moverse aun cuando la persona ya está despierta y consciente.

Se trata de un episodio que, según la opinión de científicos, posiblemente ha existido desde siempre, desde que los humanos dormimos. 

Pero, tal vez por el temor que infunde, el colectivo popular lo ha relacionado con leyendas y figuras mitológicas que asaltan a las personas en la transición entre el sueño y la vigilia. Estos son significados creados desde la desinformación y el desconocimiento.

En este post que ofrecemos desde el Centro de Neurología Avanzada nos atenemos a lo que la ciencia ha documentado sobre este trastorno del sueño. Lo abordamos y explicamos desde la luz que sobre él arrojan los estudios realizados por el personal médico correspondiente. Resaltamos lo esencial, lo relevante, lo que, al concluir esta lectura, te dejará en condiciones de comprenderlo y abordarlo.

¿Qué es parálisis del sueño?

¿Sabes qué es la parálisis del sueño? La parálisis del sueño está considerada como un trastorno que puede afectar a las personas al quedarse dormida o al despertarse. 

Es un estado transitorio, entre el sueño y la vigilia, durante el cual la persona no puede hablar ni moverse voluntariamente. Durante ese episodio, la persona está consciente de lo que acontece a su alrededor y de que sus músculos están paralizados.

La parálisis del sueño puede ser descrita como un despertar incompleto que sobreviene cuando la persona recién se duerme o está próxima a despertar. La actividad cognitiva de la persona no resulta afectada durante los segundos, o muy escasos minutos, que dura el episodio.

Asimismo, durante la parálisis del sueño se respira normalmente, el corazón late, se pueden abrir los ojos y ver, pero hay una terrible sensación de no poder realizar acciones físicas.

Es natural que al no poderse mover ni pedir ayuda porque no puede articular palabras, la persona afectada sienta mucho miedo y angustia. Pero, en este sentido es importante destacar  que la parálisis del sueño es una experiencia angustiante y muy desagradable, pero inofensiva. No constituye una fuente de peligro. Es temporal, normalmente remite sin dejar consecuencias.

En cuanto a la prevalencia de este tipo de episodios, se ha observado que son muy esporádicos los casos de parálisis del sueño en niños. Lo más frecuente es que se presente durante la adolescencia, en personas adultas con edades entre 20 y 30 años y en ancianos.

Síntomas de la parálisis del sueño

Una vez aclarado lo que es la parálisis del sueño, avanzamos a concretar las señales más características de esa breve experiencia donde el despertar de la conciencia y el despertar del cuerpo no están sincronizados:

  • Sensación de inmovilidad total o parcial.
  • Sensación de no poder hablar ni gritar.
  • Sensación de ahogo.
  • Sensación de estar atrapado.
  • Sudoración.
  • Intensa sensación de miedo.

Se presentan casos en que durante ese breve estado donde se recupera la conciencia pero no el habla ni el movimiento, la persona puede tener alucinaciones. Estas pueden ser auditivas, visuales o táctiles.

Personas que han tenido parálisis del sueño y alucinaciones, refieren haber visto sombras o elementos extraños, que aparecen vinculados con elementos reales. Por ejemplo, con la cama donde la persona se acostó a dormir. Pero no es lo más frecuente. Lo que sí es más común es sentir presión en el pecho, sensación de asfixia y mucha ansiedad.

La intensidad de estos síntomas es variable, y también su duración. Lo normal es que desaparezcan por sí solos. Se trata de señales que alarman pero que no representan peligro para la persona afectada. Las consecuencias no deberían ir más allá de sentirse transitoriamente ansiosa, confundida y agitada después del incidente.

¿Cuándo se debe consultar al médico?

Si una persona experimenta parálisis del sueño constante o recurrente, o si los síntomas resultan exageradamente angustiantes o van acompañadas de otro tipo de señales preocupantes, conviene solicitar ayuda médica. Apoyo psicológico que le ayude a gestionar el estrés y a mejorar la calidad del sueño.

En este caso también es importante abordar cualquier situación problemática subyacente que pueda estar vinculada con los síntomas de la parálisis del sueño psicológica.

Causas frecuentes de la parálisis del sueño

Las causas de la parálisis del sueño no están categóricamente establecidas. Sin embargo, está claro que ocurre cuando el cuerpo y el cerebro quedan temporalmente desconectados en cierta fase del sueño. Ello explica que la persona no pueda tener movimientos voluntarios aunque su mente está despierta y consciente.

Ahora bien, existen factores que pueden asociarse con este trastorno del sueño:

  • No dormir suficiente o privarse del sueño.
  • Variaciones en el horario de dormir.
  • Exposición reiterada a situaciones traumáticas, de estrés emocional o psicológico.
  • Someterse a cambios físicos, conductuales o mentales que descontrolen el reloj biológico del organismo.
  • Consumo de alcohol y otras sustancias.
  • Dormir boca arriba.

También se ha relacionado la parálisis del sueño con el uso de algunos medicamentos indicados para el TDAH y con afecciones mentales como el trastorno de pánico o el trastorno bipolar. Incluso, se relaciona con antecedentes familiares y la predisposición hereditaria que puede potenciar la ocurrencia de ese episodio.

Conclusión: parálisis del sueño

Finalizamos este contenido con algunas recomendaciones que pueden ayudar a evitar trastornos del sueño, parálisis, y otras situaciones conmocionantes: evitar las pantallas y estimulantes como el café antes de dormir, hacer ejercicios físicos al aire libre, establecer y respetar el horario de dormir, comer moderadamente en la cena y crear un entorno cómodo sin exceso de luz en la habitación.

Si deseas despejar alguna duda específica, te invitamos a contactarnos. En el CNA constituimos un equipo médico con el que puedes contar para afrontar situaciones neurológicas, y relacionadas, que afecten tu calidad de vida. ¡No olvides que cuentas con nosotros!