El interés sobre cómo ejercitar la memoria deriva de la importancia que todos reconocemos en esa función cerebral estrechamente vinculada a nuestra supervivencia. De ella depende que el almacenamiento, retención y recuperación de información nos conecte con eventos y experiencias de nuestro pasado.
La memoria nos permite aprender a partir de experiencias previas y tomar decisiones a partir de nuestro conocimiento. Ella juega un papel clave en la comunicación que establecemos con las demás personas. Modela muchas de nuestras habilidades y emociones; es decir, configura lo que somos y sentimos.
Es normal que con el paso del tiempo exista cierto grado de deterioro en las interconexiones neuronales que subyacen en la capacidad de memorizar. Pero diversos estudios clínicos confirman la tesis de que la ejercitación puede compensar este deterioro natural y mejorar la memoria.
Sobre cómo puede ser el entrenamiento estratégico de la capacidad de recordar, trata este post que elaboramos en el Centro de Neurología Avanzada.
Pero antes de hacer recomendaciones sobre cómo se ejercita la memoria, abordamos aspectos conceptuales sobre esta función extraordinaria del cerebro. ¡Acompáñanos con tu lectura!
¿Qué es y cómo podemos ejercitar la memoria?
Cuando hablamos de cómo ejercitar la memoria, hacemos referencia a la ejercitación de la capacidad mental de registrar, retener y recuperar la información asociada a sentimientos, ideas, imágenes o experiencias del pasado.
La memoria constituye la base de los recuerdos, conceptos y significados con los que se reconcilian e integran nuevos aprendizajes.
La memoria no solo acopia y asocia los recuerdos; ella es capaz de acceder a los datos almacenados y reelaborarlos atendiendo al presente e integrarlos al contexto actual.
Es decir, la memoria nos permite dar sentido a nuevas experiencias, propicia adaptaciones y nuevos aprendizajes. Pero, ¿Cómo podemos ejercitarla?
Ejercicios para ejercitar la memoria
Antes de explorar lo relativo a las técnicas para ejercitar la memoria, consideramos oportuno indicar que esta puede ser de varios tipos. Puede ser sensorial, a corto y a largo plazo.
Pero, en cualquier caso, existen técnicas que promueven su fortalecimiento. Entre estas, destacamos las siguientes:
- Técnicas mnemotécnicas, que sugieren crear imágenes mentales o tácticas verbales y asociarlas con lo que se desea recordar. Por ejemplo, retener en la memoria un elemento o información asociándolo con una canción, color, o un lugar concreto.
- Una vez codificada la nueva información, para crear su huella en la memoria conviene relacionarla con algo de lo ya aprendido, con algún conocimiento previo, para facilitar la memorización mediante una codificación significativa.
- La técnica de recuperación, la cual se basa en almacenar la información junto con las claves que posteriormente van a permitir acceder a ella.
La práctica frecuente de estas estrategias es indispensable para lograr memorizar eficiente y rápidamente. Pero hay mucho más que decir sobre cómo ejercitar la memoria. A continuación, proponemos ejercicios y actividades para agudizarla y mejorarla:
Actividades para ejercitar la memoria
Aunque no es posible dar plenas garantías en cuanto a la prevención de la pérdida de esta capacidad mental, ciertamente se pueden realizar ciertas actividades para ejercitar la memoria:
Mantenerse mentalmente activo
Realizar actividades físicas ayuda a mantener el cuerpo en forma y promueve la oxigenación del cerebro.
Asimismo, los ejercicios para ejercitar la memoria se convierten en estímulos que ayudan al cerebro a mantenerse en forma y pueden contener la pérdida de memoria.
Por ejemplo, tomar rutas alternativas al conducir, aprender a tocar algún instrumento musical o un nuevo idioma, participar como voluntario en una escuela u otra organización comunitaria.
Mantenerse socialmente activo
Especialmente las personas que viven solas deberían buscar oportunidades de interactuar socialmente con otras personas. Es necesario prevenir el estrés y la depresión, que son circunstancias propulsoras de la pérdida de memoria.
Mantener el orden
Mantener la casa ordenada, destinar un lugar para ciertos objetos y ejercer control sobre los asuntos pendientes ayuda a evitar los olvidos.
Anotar las tareas, citas y otros quehaceres pendientes en una libreta dispuesta solo para eso promueve su afianzamiento en la memoria.
Hacer esquemas y verbalizar cada tarea que se anota favorece la capacidad mental de recordar.
Cultivar la lectura
Leer es otro de los métodos para ejercitar la memoria. Estimula la atención, la imaginación, amplía el vocabulario, crea nuevos significados, promueve el procesamiento de información. Todo ello se traduce en estímulos para la memoria.
Otras sugerencias sobre qué hacer para ejercitar la memoria, son las siguientes:
- Dormir bien y descansar lo suficiente ayuda a consolidar la información recién memorizada.
- Tener una dieta saludable rica en antioxidantes, proteínas y otros nutrientes para el cerebro. Te invitamos a leer otro de nuestros contenidos: alimentos para mejorar la memoria.
- Controlar las enfermedades crónicas como la hipertensión, diabetes y otras vinculadas con los riñones, la tiroides y el colesterol alto.
- Abrir espacio para los pasatiempos, sobre todo los que requieren concentración y despliegue de habilidades.
- Escribir a mano no solo activa habilidades motoras; también involucra lo cognitivo.
- Escuchar música estimula las interconexiones neuronales. Reír y cantar también le hace bien a la memoria.
- Mantenerse concentrado en lo que se hace, conectado con el momento presente, evitar las distracciones y no tratar de hacer varias cosas a la vez.
- Visitar lugares nuevos despierta la curiosidad por su cultura, lengua, lugares, gastronomía, etc., lo cual activa la memoria para retener la nueva información.
Para finalizar este contenido, te proponemos que vivas con propósito. Debes creer en ti mismo, confiar en tus capacidades. Encausar tu mente hacia tus objetivos y mantenerte conectado al aquí y ahora. Sin olvidar que los momentos de descanso y relajación son muy importantes.
Cómo ejercitar la memoria: conclusión
Si deseas complementar esta información te invitamos a ponerte en contacto con nosotros.
En el CNA tenemos un equipo médico al que puedes consultar sobre cómo ejercitar tu memoria o si la frecuencia de tus olvidos supera lo normal. Sobre todo, si estos interfieren en la realización de tus actividades cotidianas. ¡Siempre puedes contar con nosotros!